La cirugía del pie se realiza en régimen ambulatorio (no precisan hospitalización), con anestesia local y por profesionales especializados en exclusividad al tratamiento del pie, para obtener los mejores resultados a nivel estético y funcional.
La aparición de nuevas técnicas quirúrgicas, junto con un mejor entendimiento del funcionamiento del pie, han dado lugar a una mejora sustancial en los resultados obtenidos. Estas nuevas técnicas producen menos dolor, son menos invasivas y causan un menor daño a los tejidos, permitiendo una pronta incorporación a las actividades diarias.